Sola y su alma

Una mujer está sentada sola en su casa. Seabe que no hay más en el mundo: todos los seres han muerto. Golpean a la puerta.

Thomas Bailey Aldrich

Abrió muy asustada porque no había nadie en todo el mundo . Era su alma y se tropezó del susto y se cayó en el alma y el alma entró en su cuerpo. Retrocedió el tiempo y volvió a abrir la puerta y era una persona más y otra, otra, otra y otra más....y descubrió que el alma lo es todo.

Micaela Vaccaro

El adiós de los sueńos

Los sueńos se marchaban de viaje. Helena iba hasta la estación del ferrocarril. Desde el andén, les decía adiós con un pańuelo.

Eduardo Galeano

EN BREVE ACTUALIZADO